jueves, 3 de junio de 2010

Memorias de una manflora

Por: Lentejuelas


Claro¡ en esta vida alguien tiene que tener la culpa… así empiezo nuevamente mis memorias.

Anteriormente había escrito sobre mi primera experiencia en un antro gay, pero gracias a Pelucas por no estar en un momento de mi debilidad; mis demonios hicieron que me levantara una madrugada a borrar mis impresiones. Solo espero volver a plasmarlos lo mejor que se pueda.

Mi andar fuera del closet no ha sido fácil, como toda mujer lesbiana que se topa con la incomprensión de la familia y de la gente, he aprendido a levantarme una y otra vez a pesar de los comentarios absurdos, de la ignorancia y de los mitos.
Romper con lo anterior, es solo atreverse; experimentar, probarlo y si nos gusta, repetirlo cuantas veces sea lo necesario.
Todo lo que nos haga feliz, es bienvenido, todo lo que nos haga infeliz; hay que desecharlo, descartarlo, tirarlo, eliminarlo, depurarlo… (Inspiración de Adela Micha, quien dice miles de sinónimos).
Si bien toco el tema de la felicidad, es porque hoy recordé una frase, no sé quien me lo dijo exactamente, si un psicólogo, psiquiatra, vecino, amigo, familia o Dios; pero el caso es que nosotros venimos a este mundo a ser felices, a vivir y a compartir con los seres humanos este espacio que solo una vez nos toca estar. Es por ello que de nosotros dependerá como llevar nuestra vida.